Artículo basado en las explicaciones de Unai Ansejo de Indexa Capital
Existen básicamente dos tipos de modelos del cálculo de la rentabilidad de las inversiones.
Existe por un lado la rentabilidad ponderada por el tiempo (en ingles TWR de Time weighted Return) en donde en una cartera donde se realizan aportaciones adicionales de dinero (o también retiradas), éstas no se tienen en cuenta. La rentabilidad ponderada por el tiempo es siempre mucho más sencilla de calcular que la que explicaré después. Sólo tiene en cuenta la diferencia entre el punto inicial y el final de la cartera sin más.
Este tipo de rentabilidad es el que se suele utilizar cuando se comparan los rendimientos obtenidos por los gestores/asesores de fondos pues no condiciona si ha entrado o salido mucho capital de los productos.
Sin embargo, y de cara a un inversor particular como nosotros, el otro tipo de rentabilidad, la rentabilidad ponderada por dinero (MWR de Money Weighted Return) es mucho más importante pues no es lo mismo constituir un patrimonio con una única aportación inicial solamente que hacerlo con aportaciones periódicas. Con las aportaciones periódicas es más difícil determinar hasta que punto estamos acertando con nuestras decisiones de inversión ya que sobre el capital que ya llevamos invertido ha estado operando una cierta “rentabilidad previa”.
Así pues, y como inversores individuales que somos debemos centrarnos en esta última para lo cual tenemos 2 opciones. O usamos un software u hoja excel para ayudarnos a calcularla correctamente o bien decidimos crear subcarteras donde el importe de las mismas sea único sin entradas ni salidas posteriores de efectivo.
En lo tocante a ABIA FUND y dado que es mi cartera personal de acciones con una única aportación inicial de 24.000 € que no ampliaré ni disminuiré, podré aplicar el método TWR en lugar del MWR simplificando así la gestión de la misma, al menos en lo relativo al tema de la rentabilidad acumulada del portfolio.